sábado, 20 de septiembre de 2008

Memorias de Adriano



..." Tengo que confesar que creo poco en las leyes. Si son demasiado duras, se las transgrede con razón. Si son demasiado complicadas, el ingenio humano encuentra fácilmente el modo de deslizarse entre las mallas de esa red tan frágil. El respeto a las leyes antiguas corresponde a lo que la piedad humana tiene de más hondo; también sirve de almohada a la incercia de los jueces. Las más remotas participan del salvajismo que se esforzaban por corregir; las más veneralbes siguen siendo un producto de la fuerza. La mayoría de nuestras leyes penales sólo alcanzan, por suerte quizás, a una mínima parte de los culpables; nuestras leyes civiles no serán nunca lo suficientemente flexibles para adaptarse a la inmmensa y fluida variedad de los hechos. Cambian menos rápidamente que las constumbres; peligrosas cuando quedan a la zaga de éstas, lo són aún más cuando pretenden precederlas"....


Así expresa Marguerite Yourcenar el pensamiento de Adriano. Así relata la sensibilidad de un emperador, sus miedos, sus inquietudes, su amor, su vida. Tan actual que asusta ver que nada nuevo hay bajo el sol. Duro por momentos como emperador, culto y sensible como hombre. Libro de referencia para comprender hasta dónde llega la sensibilidad, cómo un párrafo dibuja perfectamente un pensamiento profundo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

buenas noches magia!paso por aqui para decirte que ya aprendi a comentar en tu blog.un beso que son gratis jajaja

Anónimo dijo...

Pues eso de aprender está muy bien, me alegro de ello y como los besos son gratis, pues eso... varios... ja, ja... Saludos curranta.