Dice Santana que Nadal es el mejor deportista español de los últimos tiempos. Yo que solo soy una aficionadilla a este fantástico deporte opino igual. Este niño está colocando al tenis español en las televisiones de todo el mundo cada vez que hay un gran torneo o un abierto importante. Y no lo digo meramente por el espíritu patriótico y eso, pero creo que era necesario ya para este deporte una figura relevante y con capacidad de influencia en nuestros jóvenes, para renovar el espíritu deportivo que estos días con motivo de las olimpiadas todos disfrutamos mucho. Este chico simboliza como desde un pequeño club de tenis provincial ya se puede ver a quien va a ser el día de mañana una gran estrella. Nuestro entrenador que tuvo la fortuna de verlo entrenar de jovencito ya veía, como sus compañeros, que ese niño llegaría muy lejos, aunque siempre nos aclara que el objetivo de un club de tenis no es hacer campeones como rosquillas, qué va, el objetivo es mucho más importante aún (así también lo creo) y es que la gente se divierta jugando un deporte tan completo y aprenda a disfrutar "aprendiendo", consiguiendo que todos los integrantes, chicos y chicas, de cualquier edad, prefieran invertir parte de su tiempo en el sano hábito del deporte, y el tenis es uno de ellos.
Un brindis también por Anabel Medina y Virginia Ruano, que en dobles consiguieron la plata ante las demoledoras Williams que sólo verlas ya intimida. No hicieron un buen partido, aunque tenis para inquietarlas tenían.
A mi en particular, cualquier deportista profesional, me merece un gran respeto y admiración, no sólo aquellos que consiguen medalla, porque es una vida muy dura y sacrificada.
Tampoco deja de conmoverme el hecho de contar con unos cuantos deportistas que son compatriotas y están ayudando a deshacernos de esa casi vergüenza de confesarse español o española, en el plano deportivo, y casi también en el social y político (pero eso es harina de otro costal).
No hay comentarios:
Publicar un comentario